Llega la primera ola de calor de este verano con más de 42 ºC y la Aemet lanza un "aviso especial": estas serán las zonas más afectadas

Los termómetros se disponen a dar un cambio radical en las próximas horas. Tras el respiro vivido en las últimas horas con la bajada de las temperaturas, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha activado un aviso especial ante la llegada de la primera ola de calor de la temporada, que se asentará sobre la Península y Baleares a partir de este viernes. El responsable es un potente anticiclón en niveles medios y altos, nacido en el interior del continente africano, que se intensificará y abarcará progresivamente nuestro territorio, inyectando una masa de aire muy cálida y relativamente seca impulsada por vientos del sur.

Con la insolación propia de finales de junio, el mercurio iniciará durante las próximas horas su escalada—primero de forma discreta y con la excepción del tercio este y Baleares—para generalizarse con fuerza el viernes y el sábado, elevando tanto las máximas como las mínimas.

El núcleo de la ola se localizará en la mitad sur, en especial el cuadrante suroeste, y en las depresiones del nordeste peninsular. A partir del sábado se prevé que los 38 °C se superen de manera bastante generalizada en esas zonas, con picos de 40 a 42 °C en los valles del Guadiana, del Ebro y del Guadalquivir. El episodio alcanzará su punto álgido el domingo y el lunes: los valores por encima de los 40 °C se extenderán entonces también al valle del Tajo, mientras el entorno del Guadalquivir podría rebasar los 42 °C con gran probabilidad.

A pesar de que el cuadrante noroeste y el área cantábrica quedarán relativamente al margen gracias a un flujo atlántico más fresco, el calor no se limitará al sur. La meseta Norte, el interior de Mallorca y los valles del Júcar y del Segura alcanzarán los 36 °C e incluso tocarán los 38 °C de manera puntual, dejando un escenario de calor muy extenso para las fechas.

Siguiendo esta línea, la Aemet ha detallado que las temperaturas mínimas también serán inusualmente altas: en amplias áreas de la mitad sur y en el valle del Ebro no se espera bajar de 23-25 °C a lo largo de todo el episodio. Es decir, noches tropicales—o incluso tórridas—que complicarán el descanso y aumentarán la sensación de bochorno.

Los modelos apuntan a un alivio térmico progresivo desde el oeste a partir del miércoles. El jueves ese descenso se haría más notable en la mitad norte. Sin embargo, en el cuadrante suroeste la tregua será menos clara y es probable que todavía se mantengan registros de 38-40 °C durante esos días. Por tanto, la duración exacta de la ola variará según la zona, con un final más tardío en Andalucía occidental y Extremadura.

En las últimas semanas, nuestro país ha registrado temperaturas muy superiores a las habituales para un mes de junio. Y es que las gráficas de anomalías térmicas hablan por sí solas. No se trata de algo puntual. Entre 2022 y 2024 se han batido hasta siete récords de meses excepcionalmente cálidos. Para encontrar el último mes más frío de lo normal hay que retroceder hasta febrero de 2005, según ha explicado la Aemet en redes sociales.

Además, el pasado día 23, la estación del aeropuerto de Almería registró dos nuevos récords para un mes de junio: la temperatura máxima alcanzó los 40,9 °C y la mínima no bajó de 27,1 °C. Este observatorio recoge datos desde 1968.